El 29 de mayo del 2018 se conocerá el interés de las empresas privadas para invertir en cuatro campos petroleros y uno de gas natural. Estas áreas son parte de la ronda denominada Oil&Gas, la segunda que impulsa el Gobierno. La empresa pública Petroamazonas recibirá mañana las ofertas para las cinco áreas que sacó a licitación en marzo pasado. Entre estas se encuentran Blanca-Vinita, que no se logró adjudicar en el proceso anterior de campos menores; y Cuyabeno-Sansahuari, Yuralpa, Oso y el campo de gas natural Amistad. La apertura de estas ofertas se realizará a las 10:30, en el Hemiciclo de la Escuela Politécnica Nacional, en el norte de Quito.
El gerente general de Petroamazonas, Álex Galarraga, explicó que una vez que se reciban las propuestas técnicas y económicas se entrará al proceso de negociación. En esta fase se manejarán dos modalidades de acuerdos, según el caso. Para los campos de crudo, las empresas suscribirán un contrato de servicios específicos a cambio de que el Estado cancele una tarifa por cada barril extraído. El precio del barril estará indexado al valor del petróleo West Texas Intermediate (WTI), que sirve de referencia para determinar el precio del crudo ecuatoriano.
Con el gas natural, debido a que la Ley no permite aplicar la modalidad anterior, la propuesta será firmar un contrato de servicios con financiamiento. Es decir, las firmas deberán presentar sus ofertas para aumentar la producción en el campo Amistad y, si resulta rentable, será adjudicado. Para aumentar la producción de gas se requieren alrededor de USD 100 millones, informó Petroamazonas. En total, para estas cinco áreas hidrocarburíferas, el Gobierno espera recibir una inversión de alrededor de USD 700 millones, similar a la lograda en el proceso anterior con los campos menores. En función de los resultados de la negociación, el Gobierno espera adjudicar estos campos a mediados de julio de este año, precisó Galarraga.
El contrato se prevé que dure 10 años. En este período, Petroamazonas se mantendrá como operador de estas áreas. Para que este proceso tenga éxito se requiere que el Gobierno entregue a las firmas privadas información transparente sobre los campos a licitar y, una vez que se suscriban los acuerdos, cumplir con los contratos, señaló René Ortiz, exsecretario General de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). “Estos aspectos generarán a las empresas privadas mayor confianza para trabajar e invertir en Ecuador”.
El ex vicepresidente de Petroindustrial, Edmundo Brown consideró, al tratarse de campos productivos, que estos resultarán atractivos para las empresas privadas, porque ya cuentan con facilidades y tienen una producción mayor a los 5 000 barriles diarios, excepto en Blanca-Vinita, cuya producción es menor. En total, la producción petrolera actual en estas cinco áreas suma 36 638 barriles de crudo por día y 4 957 barriles equivalentes de gas natural. Pero el objetivo de la petrolera estatal es incrementar en alrededor de 25 000 barriles por día y abastecer la demanda de gas en los siguientes meses.
Álex Galarraga dijo que en la fase previa a la presentación de ofertas -preguntas y respuestas- se contó con alrededor de 33 empresas, cuatro de ellas tienen expectativa por invertir en el campo de gas natural Amistad. Inicialmente, en este proceso se contó con 68 cartas de interés para Cuyabeno (17), Oso (16), Blanca-Vinita (15), Yuralpa (14) y el campo Amistad (6). Pero no todas superaron la etapa de evaluación. La ronda Oil&Gas es la segunda que impulsa Petroamazonas en el actual Gobierno. En febrero pasado se adjudicaron cuatro campos menores, de 15 que salieron a licitación. Se trata de Guanta, Paka Norte, Parahuacu y Drago, a las empresas Consepetro, CNPC y Wayraenergy.
Carlos Pérez, ministro de Hidrocarburos y Electricidad, explicó que estas empresas tienen listo el plan de actividades e inversiones para estas áreas petroleras, por eso se espera que en junio empiecen a operar. Las primeras intervenciones se enfocarán en perforación de pozos. Con estas acciones, el Gobierno espera incrementar la producción nacional de crudo. El petróleo extraído de los campos menores se contabilizará como parte de Petroamazonas.
Una vez adjudicados los campos de Oil&Gas, estos tendrán el mismo tratamiento. La modalidad que tendrán los contratos de campos menores será de servicios específicos y tendrán una vigencia de 10 años. Durante ese período se espera que aporten con 90,8 millones de barriles de crudo. Actualmente, la producción nacional está en 521 650 barriles de petróleo y la meta del Gobierno, para fines de año, es llegar a los 540 000 barriles.
Luego de la ronda Oil&Gas, Petroamazonas no tiene planificado buscar inversión para otros campos en este año. Sin embargo, el Ejecutivo sí impulsará dos procesos más: Intracampos y Sur Oriente. Para el primero se requiere un Decreto Ejecutivo. La otra licitación está prevista que salga a fines de este año, una vez que se haga una nueva ronda de validación con las comunidades, refirió Pérez.