El gobierno nacional decidió no incorporar más desarrollos al programa de subsidios para la producción de gas no convencional y de abonarlo sólo sobre las curvas de producción inicialmente previstas, esto generó una ola de cuestionamientos de parte de las petroleras. No sólo amenazan con iniciar acciones legales sino también con revisar si continuarán con las inversiones planificadas.
La más afectada en el cambio fue Tecpetrol por el desarrollo explosivo que hizo en Fortín de Piedra. La firma anunció que por la nueva lectura de la letra chica que hace el secretario de Energía de la Nación, Gustavo Lopetegui, podría dejar de percibir hasta 5.655 millones de pesos por la producción que tuvo el año pasado. La petrolera del Grupo Techint anticipó no sólo que analiza iniciar acciones legales contra el Estado sino que indicó que va a “revisar el plan de desarrollo” para adecuarlo al nuevo flujo.
Por su parte YPF informó a la Bolsa de Valores que el cambio les genera “un efecto negativo en el resultado neto del ejercicio 2018 de 60 millones de dólares”. Las diferencias reclamadas se deben a que por un lado Nación fijó sólo pagar el volumen al cual pretendía llegar cada yacimiento al presentarse al plan, en 2017. En el caso de Tecpetrol implica que la mitad de su producción actual no tendría subsidio. El segundo recorte pasa por pagar sólo sobre la curva de evolución presentada, es decir que si hubo una mayor producción tampoco tendrá el subsidio que el pasado garantizaba 7,50 dólares por millón de BTU.
Las empresas YPF, Tecpetrol y PAE con su desarrollo Aguada Pichana Oeste superaron en varios meses esa curva proyectada y ahora dejarían de percibir una parte del subsidio que ya habían contabilizado cobrar. Pero además YPF también anticipó que va a “evaluar la continuidad de las inversiones en los proyectos de desarrollo que no contarán con el beneficio”. Una medida que en conjunto de los bloques que no accedieron al plan engloba inversiones por 3.000 millones de dólares. La cuenta de las empresas parte de que mientras esperaban vender su gas a 7 dólares este año, sin el subsidio deberán cerrar sus flujos de inversión con un valor del gas que tiende a la baja y que de momento se sitúa casi a la mitad de lo que esperaban, en 4 dólares por millón de BTU.
Gustavo Lopetegui le anunció a las petroleras, como una suerte de paliativo y para evitar que los doce proyectos que no ingresaron al plan nunca pasen de la fase piloto, que diseña un nuevo plan de subsidios pero acotado a los meses de invierno. El programa se extendería desde mayo a septiembre y pagaría entre 2 y 2,50 dólares por millón de BTU a los desarrollos que incrementen su producción de gas no convencional. Este nuevo plan es una parte de la reforma que Lopetegui buscaba aplicar a la Resolución 46 y que ahora, al darse como un nuevo programa, permitiría a Nación eludir una tanda de reclamos judiciales, al menos por esta parte de la reforma que tiene su origen en el recorte presupuestario dictado por el (FMI).
El objetivo principal de la medida es que el gobierno no caiga en el papelón de tener que traer nuevamente el buque regasificador de Bahía Blanca.
