El presidente Bolsonaro quiere realizar proyectos de bombeos basados en instalaciones solares flotantes a lo largo del Río San Francisco, que es una de las principales arterias de agua del país.
A través de un Twitt el mandatario indicó la voluntad de instalar placas solares a lo largo de los canales para que la energía solar pueda ser utilizada en el bombeo del agua, el presidente de Brasil hizo ayer su primera declaración sobre el desarrollo de la solar y las renovables, después de varios meses de silencio después de su elección a finales de octubre.
Probablemente la noticia no nos diga mucho a propósito de los planes de Bolsonaro en cuanto a las eventuales modificaciones del cuadro reglamentario para la energía solar de Brasil, pero si muestra claramente que el nuevo presidente es bien consciente de las grandes ventajas en términos económicos de la fotovoltaica para proyectos de bombeo.
Los proyectos serían realizados principalmente en las proximidades del Río San Francisco, que se extiende por 2.831 km entre los estados de Bahía, Minas Gerais y Permambuco, y es más bien conocido como el río de la unidad nacional o río de la integración nacional. El plan, llamado “Projeto de Integração do São Francisco”, sería implementado por el Ministerio de Desarrollo Regional.
