El superintendente de Industria y Comercio, Pablo Felipe Robledo, emitiría, en los próximos días, un fallo acerca de si las firmas Bureau Veritas Colombia Ltda. y Tecnicontrol SAS, son o no responsables de infringir la legislación contra la libre competencia en un contrato con Ecopetrol, y en ese mismo sentido decidirá si las sanciona o no.

Existe un informe motivado en el cual el Delegado para la Protección de la Competencia, Jorge Enrique Sánchez, sustenta su propuesta de que la sentencia sea condenatoria. Si Robledo lo suscribe, como ha hecho prácticamente siempre con las recomendaciones de su subalterno, ambas empresas se verían abocadas a pagar hasta $72.000 millones cada una y sus directivos en el momento en que ocurrieron las presuntas conductas: Renato Macedo de Catrib Filho, de Bureau Veritas Colombia; y René Omar Pedraza Acuña, de Tecnicontrol, podrían verse obligados a desembolsar hasta $1.400 millones cada uno.

Este caso se relaciona con la convocatoria 50025407 que tenía como fin escoger una empresa para transportar petróleo en carrotanques. Ocho compañías acudieron y cinco quedaron habilitadas al final, entre ellas Bureau Veritas y Tecnicontrol, pero finalmente fue la primera de las mencionadas la que se hizo a un contrato cercano a los $25.000 millones.
En el año 2016, se abrió la investigación, luego de que la SIC recibió una denuncia pues, según el expediente, ambas se habrían presentado haciéndose pasar como “competidores reales, independientes y autónomos”, aunque en realidad obedecían a un interés común –el del grupo francés Bureau Veritas International–, y habrían coordinado “todos los aspectos relacionados con su participación de manera idónea para incrementar las posibilidades de que alguna de ellas resultara adjudicataria”. Aún sin firmarse el contrato ya se habían escuchado ruidos al respecto y la empresa de mayoría estatal les había pedido que certificaran si eran socias entre sí. La respuesta, según una fuente ligada con el proceso, fue que no.

El informe motivado señala que se limitaron a contestar estrictamente lo preguntado, a sabiendas de que lo importante era determinar su independencia mutua. Así fue como Ecopetrol avaló que ambas estuvieran en el concurso.

Igualmente se documentó en el proceso  que solo en el 2015 Bureau Veritas y Tecnicontrol se integraron oficialmente, pero el proceso de compra se hizo entre el 2012 y el 2013 y en ese lapso habrían comenzado a actuar coordinadamente. De hecho, se anexaron pruebas de esta injerencia. Por ejemplo, algunos documentos que indicarían que Renato Macedo, representante de Bureau en Colombia, fue quien aprobó el organigrama de Tecnicontrol. Así mismo, hay correos en los cuales se registra la conversación entre altos funcionarios que aluden a quién de las dos debía ganar el proceso.

En el informe además se evidencia que se hallaron por lo menos cuatro convocatorias más de Ecopetrol, por montos similares, en el transcurso de un año, en las que las dos firmas habrían incurrido en la misma conducta anticompetitiva, así como otros contratos con Pacific Rubiales y Chevron.

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