El gobierno venezolano resolvió un reclamo de arbitraje de US$1.200 millones para evitar que su activo más preciado en el extranjero, la unidad de refinación de Citgo Petroleum Corp en Estados Unidos, sea confiscado por un acreedor, de acuerdo a documentos judiciales canadienses. El arreglo con Crystallex International Corp suspende la orden judicial para que la minera canadiense se haga con el control de Citgo como manera de cobrar una indemnización decidida en un fallo de arbitraje contra Venezuela, que con interés ha crecido a US$1.400 millones.
El pasado 23 de noviembre Venezuela completó un pago inicial de US$425 millones, en gran parte en “valores líquidos”, de acuerdo a una presentación en la Corte de Justicia de Ontario, donde Crystallex ha estado operando desde 2011 bajo protección de acreedores. El país sudamericano acordó pagar el monto restante en cuotas a principios de 2021. Si Venezuela no logra acreditar antes del 10 de enero los colaterales para los pagos restantes, Crystallex puede reiniciar los procedimientos legales.
En el estado de Delaware (USA), un juez estadounidense iba a escuchar el 20 de diciembre los argumentos para subastar a Citgo de su principal matriz, PDVSA, la compañía petrolera estatal de Venezuela. Citgo opera tres refinerías en Estados Unidos que son un destino clave de las exportaciones de crudo de Venezuela, y ha sido valuada en miles de millones de dólares. Mientras Venezuela ha sido jaqueada por una crisis económica y por sanciones estadounidenses, y suspendió pagos de deuda por decenas de miles de millones de dólares, se ha focalizado en retener el control de Citgo.
La minera canadiense y Venezuela llegaron a un arreglo el año pasado, el país sudamericano lo logró mantener el acuerdo de pago tras transferir US$75 millones. Venezuela expropió un proyecto de minería de oro de Crystallex en 2011, lo que llevó al fallo de arbitraje en 2016. A medida que los incumplimientos de pagos de la deuda de Venezuela se han acumulado y las sanciones de Estados Unidos han aislado al país, los acreedores han comenzado a ir tras los activos de PDVSA en el extranjero como medio para recuperar su dinero.
Por su parte ConocoPhillips, empresa internacional de energía cuya sede central está ubicada en Houston, Texas, dijo en octubre que recibió US$345 millones en efectivo y materias primas en el tercer trimestre de parte de PDVSA, como parte de un acuerdo en cuotas para cobrar un laudo arbitral de US$2.000 millones.
Venezuela y Rusoro Mining Ltd. llegaron a un acuerdo en octubre, cinco meses después de que la minera canadiense presentó documentos en Estados Unidos para perseguir a Citgo y cobrarle un laudo arbitral por un valor de US$1.300 millones por una mina de oro expropiada.