Repsol ha alcanzado un acuerdo de buenas intenciones con la empresa canadiense New Stratus Energy para la venta de bienes en Ecuador. Así que el grupo español de petróleo y gas abandonará el país sudamericano, donde está presente desde hace casi veinte años.

En concreto, el acuerdo supondrá la adquisición por parte de la firma canadiense de una participación indirecta del 35% en los contratos de servicios de los bloques 16 y 67, ubicados en la provincia de Orellana. También participación indirecta del 29,66% en Oleoducto de Crudos Pesados ??Ecuador (OCP), según New Stratus Energy.

El cierre de la operación depende de la aprobación por parte del gobierno ecuatoriano y las autoridades reguladoras, así como del cumplimiento de las condiciones habituales para la transacción. El acuerdo asciende a unos 5 millones de dólares (unos 4,2 millones de euros) que se pagarán en dos cuotas. Sin embargo, podría haber pagos contingentes adicionales vinculados a determinadas circunstancias, como una extensión del plazo de los contratos de servicios. Esto llevaría la cifra a 12 millones de dólares (unos 10,1 millones de euros).

La operación se enmarca en la estrategia de Repsol de flexibilizar su cartera de upstream (Exploración y Producción) para priorizar el valor. De hecho, en los últimos años el grupo energético ha desinvertido activos en Rumanía, Angola, Papúa Nueva Guinea, entre otros, dentro de este plan de abandono de países o activos donde tenía menores márgenes o expectativas.